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Las prioridades del sector

El Perú recibe su Bicentenario con una agenda pendiente de competitividad y sostenibilidad, además de la superación de la pobreza hoy focalizada.

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Por David Gonzales, Coordinador de la Cámara Peruana del Café y Cacao

Es tarea de todos generar el desarrollo a partir del crecimiento de la economía y la gestión del Estado, no sólo en distribución de riqueza, sino también en impulsar los mercados internos. En macro, es la consolidación del país en vías de desarrollo a ser una economía emergente. En micro, el bienestar de toda la población.

Café y cacao han sido dinamizadores de la economía regional en la selva peruana. El desarrollo de esto sectores ha reducido la pobreza, generando nuevos mercados de servicios e insumos, y orientando importante gasto público. Este trabajo, más la inversión de privados y la gestión comercial de empresas y cooperativas, han permitido tener visibilidad en el mercado internacional: estamos entre los diez primeros en cada caso. El Estado gestiona los acuerdos comerciales y promociona, mientras que los privados asumen los riesgos comerciales de la venta.




La agenda del sector es amplia, pero podemos priorizar tres aspectos: 1) Productividad, es de las más bajas en la región y se ha mantenido así más de una década, esto reduce ingresos al productor y afecta operaciones de empresas y cooperativas. 2) Sostenibilidad y trazabilidad, es necesario que el Perú lidere a nivel mundial la producción sostenible, imagen que se ha impulsado por más de 20 años y que ahora necesita ser consolidada con instituciones y procesos que brinden confianza a los mercados. Sin esa confianza, la producción nacional será cuestionada y su precio castigado. 3) Cohesionar las cadenas, la tributación y formalidad descansa en pocas empresas, que por su escala son pilares regionales y referentes de mercados locales e internacionales. Sin embargo, en los últimos años, nuevos actores han atendido mercados externos e internos, dando una importante dinámica regional. Es un reto que estos emprendimientos, como cafeterías, tostadurías, chocolaterías y demás, impulsadas por cooperativas y empresarios, se mantengan, pues cohesionana a los agricultores, comerciantes e industriales; y fidelizan a consumidores de los productos peruanos.

En el mercado interno, la dinámica de consumo está con el viento a favor. El café y cacao peruano ha incrementado su presencia en los hogares, hay una mayor oferta y disponibilidad de productos. En las regiones somos testigos de los procesos de creación de valor, impulsado muchas veces por jóvenes que con pasión invierten y dan protagonismo comercial. Es importante mantener y consolidar estos espacios, replicarlos cuando sea necesario y evitar saturar mercados. Si bien los consumidores han reaccionado favorablemente, la recesión de la pandemia obliga a ver estratégicamente como crecer.


                                                                                                Ericka Rosas, de Capuccino Cusco Café

Desde la Cámara Peruana del Café y Cacao vemos este auge de inversión como un aspecto favorable que consolida las cadenas, las diversifica y, sobre todo, las soporta. Es primordial no dejar de ver que más del 90% de ambos productos se destina al mercado internacional, sobre el cual la agenda es la misma, los mercados han dado al café y cacao peruano un lugar reconocido y esperado: empresas y cooperativas tienen inversiones en cadenas de suministros que están en constante adaptación. Es importante brindar señales de que estaremos ahí en el futuro, el prestigio de nuestro país descansa en que los actores mantengan la seriedad del negocio.

Finalmente, es importante reconocer el rol de la profesionalización que ha tenido el proceso, aportando jóvenes, técnicos, gestores y agricultores líderes, muchos de ellos gestionando recursos privados y asumiendo riesgos. La agenda pendiente está básicamente con el campo y no son sólo aspectos sectoriales, son también sociales, la calidad de vida a los productores: su acceso a servicios como agua potable, educación básica y conectividad. Todo esto requiere políticas e institucionalidad, decisiones que se sostengan con el tiempo. en la Cámara Peruana del Café y Cacao estamos rumbo a nuestro aniversario número 30, y coincide con el crecimiento que ha tenido en el sector, pero este resultado es el trabajo de todos sin exclusiones, café y cacao peruano tienen más consumidores por el empuje de privados y llegaremos a más, si el trabajo es articulado.

David Gonzales, Coordinador de la Cámara Peruana del Café y Cacao